Ver para Creer
"Después del pase a Cani no sentía el tobillo"
A 30 años del recordado gol de Claudio Paul Caniggia a Brasil, Diego Armando Maradona recordó lo que sufrió ese encuentro por la lesión en su tobillo.Una de las grandes duplas que dio la Selección Argentina fue la que compartieron Diego Armando Maradona y Claudio Paul Caniggia. Teniendo grandes recuerdos, uno de los tantos goles que quedó en la retina de todos los argentinos fue el que marcó el Pájaro ante Brasil en el Mundial de Italia '90 que le permitió al equipo de Carlos Bilardo a los cuartos de final.
Justamente en dicha cita mundialista, Pelusa no pudo estar en su plenitud física por una lesión en el tobillo, por lo que el actual técnico de Gimnasia sostuvo: "Pocas veces sentí tanto dolor como en ese Mundial. No sé cómo me aguantó el tobillo. Me acuerdo que me lo rompen con Rumania de un puntinazo, llegué al vestuario en el entretiempo y no podía pisar".
Dejando en evidencia lo que significaba jugar con la Albiceleste, El Diego agregó: "El médico me dijo que no podía salir al segundo tiempo, pero era el partido que nos dejaba en octavos o afuera. Ni muerto me lo perdía, así que me infiltraron y salí a jugar".
Uno de los partidos que más sufrió fue ante la Verdeamarela, donde a diez minutos para el final lustró la lámpara para que Caniggia logre anotar el 1 a 0. A lo que fue esa jugada, relató: "Cuando le doy el pase a Cani, sentí un pinchazo tremendo. Yo me quedé tirado viendo cómo Cani hacía el gol y sentía un dolor infernal. Creo que me levanté de la alegría del gol, pero no sentía el tobillo".
Su lesión no cambió a lo largo del Mundial, por lo que Maradona apuntó: "Varias veces me junté con el doc y me dijo de no seguir jugando, que no podía en ese estado. Pero yo no iba a dejar solos a los muchachos: ellos me demostraban en cada partido que dejaban la vida y yo como capitán no me iba a bajar. Por eso me infiltraban cada partido, me sacaban jeringas de líquido. Sentía como que me agarraban el tobillo con una tenaza y me lo retorcían. Solo no sentía dolor en los 90 minutos, porque lo único que me importaba era dejar todo en la cancha".
Por último, en diálogo con Infobae, El Diego compara lo que hizo ese equipo en el '90 con los actuales jugadores, por lo que sentenció: "Cuando veo que algunos se bajan por un dolor o molestia, no los entiendo. Nosotros ese Mundial lo jugamos todos rotos: yo además del tobillo, tenía los aductores casi destruidos, y no tenía uña del dedo gordo. Ruggeri tenía una pubalgia tremenda, Burru y el Checho estaban al límite, y sin embargo dimos todo".