El compañero de Messi que no se calló nada

El histórico 8 a 2 ante el Bayern Múnich pegó fuerte en el mundo del Barcelona y aún la herida sigue abierta. No solo le costó el puesto a Quique Setién sino que varios jugadores ya están con un pie afuera.

Sin embargo, en medio de todos los rumores de partida, Luis Suárez rompió el silencio al disparar: "Se habla de algunos nombres que dio el presidente, de cambios que se pueden dar, pero nadie me dijo que quieran prescindir de mí; si este es el deseo del club estaría bien que el responsable que elija hable directamente conmigo".

En esta misma línea, en la cual el charrúa es uno de los más apuntados por su relación con Lionel Messi, que mantiene en duda su continuidad, agregó: "Llevo seis años en el Barsa, tiempo suficiente para decir lo que piensan. Mejor así que filtrar si soy uno de los que quieren que salga. Está por ver. Yo también quiero lo mejor para el club y mi idea hoy es seguir, pero si desde el club piensan que soy prescindible, no tengo inconveniente en hablar con los que decidan".

Justamente al referirse de la amistad que mantiene con la Pulga, el Pistolero fue claro al indicar: "Ser amigo de Leo es un orgullo para mí, porque en la cancha no hay amigos, hay compañeros de equipo y estamos para ayudarnos todos con un objetivo común. Y, fuera de la cancha, tengo la suerte enorme de contar como amigo con una persona excelente como es Leo, una amistad que va más allá de jugar juntos hoy, que es algo circunstancial".

Sin entender lo que sucedió en Lisboa contra el Bayern Múnich, el delantero del Barcelona analizó: "Fue uno de esos días donde todo salió mal. Nos vimos superados y no supimos cómo arreglarlo. Veníamos quizá con algunas dudas y el Bayern lo tenía todo clarísimo".

Siendo autocrítico de la histórica derrota, añadió: "Cuando se pierde como se perdió en Lisboa todos somos responsables. Eso está claro, no sería justo señalar solo a un jugador o a alguna persona del club. A veces sí parece que se quiera personalizar, pero honestamente creo que nadie puede poner en duda mi compromiso con el Barcelona".

Pese a los rumores de partida, el delantero de 33 años quiere revertir la historia por lo que reconoció: "Siempre que se cuente conmigo yo quiero seguir aportando todo lo que pueda. Siento el apoyo de la gente desde que llegué y eso me da mucha fuerza también para continuar".

Es por eso que Luis Suárez, en diálogo con el País de España, marca que no le interesa que le aseguren titularidad, por lo que sentenció: "Obviamente me banco ser suplente. Lo aceptaría aquí como lo acepté siempre en mi carrera. La competencia siempre es buena y si el técnico considera que debo arrancar desde el banco no tengo problema en ayudar con el rol que me otorguen. Creo que aún puedo aportar mucho a este club".

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