La segunda jornada de la Copa de la Liga Profesional fue testigo de las victorias de Boca y River que sumaron sus primeros tres puntos. En la vereda de enfrente se encuentra San Lorenzo, que sufrió una dura derrota que lo pone contra las cuerdas.

El tropiezo inicial en Santa Fe sorprendió a más de uno, pero en River dieron vuelta la página rápidamente y se desquitaron con Patronato: fue goleada 4-1 de la mano de Julián Álvarez, que nuevamente fue la gran figura del equipo, esta vez marcando un triplete.

Boca no quiso ser menos que su clásico rival y cumplió en Mar Del Plata. La igualdad ante Colón puso contra las cuerdas al Xeneize que se recuperó con la victoria 2-1 ante Aldosivi con un doblete de Sebastián Villa, MVP del equipo.

Actuaciones auspiciosas tanto de Boca como de River que ilusionan a sus hinchas de cara al futuro, a diferencia de San Lorenzo que se mantiene en la misma sintonía que en 2021 y ya comienza a hundirse en la parte baja de la Copa de la Liga Profesional.

UNA DERROTA DE SAN LORENZO QUE CALÓ HONDO EN LA INTERNA DEL PLANTEL

San Lorenzo mostró la peor versión de la era de Pedro Troglio y sufrió una dura caída (1-0) ante Gimnasia de La Plata. Más allá del resultado, Néstor Ortigoza puso el foco en la actitud del equipo y se mostró autocrítico en la conferencia de prensa posterior al encuentro.

“Hoy no podemos ni mirarnos a la cara. No estuvimos intensos, no fuimos vivos. Tenemos que volver a la base, a ser un grupo fuerte que no de pelotas por perdidas, no podemos entrar en punta de pie como entramos”.