
Entrevista a Walter Perazzo:
"La opinión que tengo yo es la misma que tiene generalizada todos los argentinos, que dejó muchas cosas en deuda, no había muchas expectativas antes del torneo ni durante el torneo porque el equipo no generó confianza y terminó como debía terminar. Uno en la previa decía que se podía pasar la primera ronda y a lo sumo pasar a octavos y eso pasó".
"El tema de los proyectos y los procesos, es una política que se ha dejado después que se fueron Pékerman y Tocalli, lo importante de ese ciclo no fue haber ganado el primer torneo que jugó, sino que estuvo en el cargo 12 o 13 años y ahí uno puede ver las cosas porque en ese proceso han ganado mundiales, quedaron afuera en los preolímpicos, le han tocado buenas y malas pero lo importante fue la continuidad, y más en trabajos juveniles. A partir de ahí ya no hubo más continuidad sea quien fuese el técnico, si hablamos de la Sub-20 la dirigieron dos años Batista, después yo, después Troviani, después Grondona, entonces no hay proceso que funcione en juveniles con períodos tan pequeños".
"Lo veo complicado porque no veo a nadie que sostenga una idea ante la adversidad, a mi me tocó estar y en el primer traspié te tenes que ir. Yo jugué seis o siete torneos de preparación en Japón salimos campeones, en Córdoba, Bolivia, Paraguay salimos campeones; fuimos a los sudamericanos preolímpicos, clasificamos terceros y como no entramos a las Olimpiadas ya todos querían que me echen, después en el Mundial nos fuimos en cuartos por penales y querían que me echen porque no salimos campeones, fuimos a los panamericanos, perdimos la final con México y lo mismo. Si no salís campeón es como que no sirve nada por más que la producción haya sido un 80 por ciento efectiva y en juveniles tenes que tener un proceso largo, son muchas camadas".
"Porque el ciclo se interrumpe, yo manejé la categoría 91, 92 y es una edad linda para el fogueo. Creo que Andrada es un arquero que tenía que tener continuidad, si no se la das es como un chico que juega en tercera y nunca lo pones en Primera; Pezzella, Lamela también tenían que tener el proceso de Selección Mayor. Si juega o no juega es otro tema pero mi proceso se interrumpió y esos chicos estuvieron cuatro años sin volver a la Selección y las otras selecciones siguieron con su parte formativa".
"Obviamente uno no puede quedar afuera en la primera ronda de los Sudamericano pero eso es porque se dejó de darle importancia a los juveniles. Antes en la previa a un Mundial en juveniles tenías torneos para prepararte, los clubes estaban obligados a darte a los jugadores, yo cuando fui al Mundial había jugado un solo amistosos con Guatemala en Ezeiza y cuando fui a los Preolímpicos River no me dio a Pereyra, no me dio a Lamela ni a Funes Mori. Al juvenil se lo descuidó en muchos aspectos y eso repercute en la formación y el carácter del jugador".
"No se sabe, estos jugadores que te nombré serían distintos si hubieran tenido 30 o 20 partidos en la Selección Mayor para terminar su formación. El único que fue, fue Tagliafico y a los demás nunca se los probó, entonces queda como que no hay pero Pezzella es capitán de la Fiorentina y en este Mundial hubiese sido importante".
"El verdadero hacedor de los jugadores son los clubes, ellos son los que los tienen el 90 por ciento del desarrollo. Ese proceso arranca en los clubes, continúa en las juveniles y seguir en la mayor, las camadas son muy buenas pero a veces no se vuelven a repetir, Cambiasso, Aimar, Riquelme, el mismo Messi, el proyecto tiene que estar en los clubes y después se verá en las mayores. En las juveniles estamos festejando un título y no que un jugador llegue a la mayor sabiendo manejar las dos piernas".
"La parte formativa la tengo adentro, siempre me fluyó la parte de enseñar, siempre se puede mejorar, aprender. A mi me gustaría aportar mi experiencia, no sé si dirigir juveniles porque es un ciclo que viví y estoy en otro proceso pero sí aportar ideas para que Argentina aproveche la materia prima que es muy buena".
"Es medio tomado con pinzas, hay un tira y afloje por el tema económico, son jugadas políticas de uno y otro lado. Más allá que continúe o no, creo que el ciclo está terminado".
"Lo que es importante es no pensar en que se va a volver a repetir lo de Pékerman porque eran otros momentos, otra camada de jugadores. Más allá de los nombres, hay que sostener un mánager para las juveniles que esté alejado de lo que sucede en la mayor, que se apueste a un trabajo de ocho años que es lo que se necesita para dar un perfil y se vea en la mayo".
"Es complicado porque en el primer traspié te miran con otros ojos y acá hay que mirar otras cosas, cómo se trabaja; habría que analizar más en juveniles, se necesitan personas confiables y que tengan espalda para estar".